miércoles, 25 de noviembre de 2015

LOS RETOS A LA EDUCACIÓN EN EL SIGLO XXI

Con el modelo tradicional las sociedades agrarias e industrializadas, enseño a las personas a aprender a leer y a escribir; no, con la finalidad de transmitir conocimiento si no para que las personas fueran obedientes y rutinarias a las fábricas, al agro y a las instituciones que en ese momento eran las principales. 


Las personas que estaban en contra o no cumplían las normas eran castigadas.
Debido a los diferentes cambios sociales, económicos y políticos la escuela tradicional ha empezado a desfasarse, siendo denominada por el autor, como: inútil e impropia, porque la sociedad variable plantea nuevos retos y demandas. Por ello, la disociación creciente entre la escuela y sociedad contemporánea, en América Latina y en el mundo globalizado y porque la escuela tradicional sigue siendo dominante incluso en los países industrializados.

Hoy en día el sistema educativo se ve vinculado a empresas, industrias e instituciones de baja calidad ofrecida por el sistema educativo. 

Henry Wallon dice que el hombre se debe de caracterizar en tres dimensiones: cognitiva, afectiva y motora. La primera dimensión estaría ligada con el conocimiento, la segunda con el afecto, la sociabilidad y los sentimientos; y la última, con la práctica.

Es importante, el desarrollo de los procesos de pensamiento para que el alumno sea critico de su realidad.

Formar a hombres autónomos que no se dependa de nadie para poder realizar los objetivos y metas; que labore sin ser sometido por otros, ni sea cohibido a expresar lo que piensa.

Favorecer el interés por el conocimiento será esencial en una época en la cual la educación no tiene límites de edad ni de épocas

Construir una escuela responsable, ya que cualquier falla quien recibe las consecuencias es el alumno, la familia y la sociedad.

En conclusión la escuela tradicional plantea en formar e instruir obreros, para que sigan manteniendo el poderío, sobre los demás. Por otro lado, se plantea a través de dimensiones formar al hombre para evitar esta situación, formando su pensamiento crítico y autónomo. 

La escuela tradicional dio respuesta a las sociedades agrarias e industrializadas. Pero detrás de trabajadores obedientes y rutinarios a las fábricas, al agro y alas instituciones de la “segunda ola”. Reforzó la sumisión con el castigo, el grito y la vara. Para trabajar en las fábricas, el campo y las instituciones propias del periodo industrial y agrario, estas eran las habilidades demandadas.

La escuela tradicional no responde a las nuevas demandas y necesidades, sino se muestra obsoleta frente a los dramáticos cambios sociales, económicos y políticos.


En la actualidad se vive un desfase entre la sociedad y el sistema educativo. En el mundo entero la escuela tradicional sigue siendo la escuela dominante, incluso en los países industrializados.




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